A pesar de los estragos físicos de la edad, las personas mayores son más felices que los adultos más jóvenes.
Así lo ha demostrado un nuevo estudio, publicado en la revista Journal of Clinical Psychiatry, en la que los investigadores analizaron los datos recogidos de una muestra aleatoria de 1.546 personas de edades de 21 a 99 en San Diego. Después de una entrevista telefónica, las personas en el estudio completaron una larga encuesta preguntando por su salud física, cognitiva y mental. Los temas de las preguntas incluyeron lo feliz y satisfechos que estaban con su vida, así como lo deprimidos, ansiosos o estresados que eran.
«Existe esta idea de que la vejez es mala, todo es muerte y la oscuridad y las personas mayores están generalmente deprimidas, de mal humor e infelices», dice el autor del estudio, el Dr. Dilip Jeste, un psiquiatra geriátrico y director del Centro de Envejecimiento Saludable en la Universidad de California, San Diego. La felicidad y el bienestar se cree que toma una curva en forma de U a lo largo de la vida, la inmersión en la mediana edad antes de la marcha lenta hasta más tarde en la vejez.
Pero eso no es lo que dicen las encuestas. Las personas mayores eran físicamente más discapacitadas y tenían un deterioro cognitivo mayor que los más jóvenes debido a la degradación natural del envejecimiento, pero en la salud mental, la ventaja se volteaba. Las personas de entre 20 y 30 años dijeron tener los niveles más altos de depresión, ansiedad y estrés, además de los niveles más bajos de felicidad, satisfacción y bienestar. Las personas mayores, sorprendentemente, fueron las más felices.
Sobre el estudio de la Salud Mental.
El estudio fue sólo realizado en un instante en el tiempo; no siguió a la gente para realizar un seguimiento de sus respuestas y conocer si cambiaban a lo largo de su propia vida. Pero tomado en su conjunto, «a medida que envejecían, parece que las cosas empezaron a ponerse mejor para ellos», dice Jeste. «Esto sugiere que con la edad, hay una mejora progresiva de la salud mental».
¿Qué es tan terriblemente difícil de ser joven? Después de la turbulencia de la adolescencia, la vida real empieza, con sus muchas demandas financieras, educativas, románticas y orientadas a su carrera, dice Jeste. «Hay una presión constante: usted está buscando lo que otros hacen y siempre que se siente mal de que no está teniendo éxito como algunos de ellos, y se siente como que tiene un montón de opciones, pero en realidad no estás haciendo uso de ellas».
Las personas mayores son mucho más capaces de sacudir pequeños factores estresantes de la vida y acumular una cosa valiosa llamada sabiduría: estar emocionalmente estable y compasivo, conocerse a sí mismo y ser capaz de tomar decisiones inteligentes sociales, dice Jeste.
Algunas evidencias sugieren que la vida hoy en día también es realmente más fácil para la gente mayor de lo que solía ser antes; un estudio encontró que los síntomas depresivos en la edad avanzada han disminuido entre 1998 y 2008. Otra investigación apoya una tendencia a empeora para los adultos más jóvenes, que parecen tener más depresión y ansiedad que los jóvenes en las últimas décadas.
Aunque las razones por las que aún no están claras: «es concebible que los cambios en el funcionamiento de la sociedad debido a la progresiva globalización, el desarrollo tecnológico, el aumento de la competencia para la educación superior y para los trabajos mejor pagados y los cambios en los roles de las mujeres en la sociedad es probable que el impacto sea mayor en mujeres y hombres jóvenes más de lo que podrían afectar a las personas de edad avanzada», dice Jeste. «Los cambios relativamente rápidos tienden a poner en tensión a las personas más afectadas».
